El CEO de Black Star Petroleum lidera una inversión clave en nodos logísticos para asegurar el abastecimiento energético ante escenarios de tensión geopolítica y climática
En un movimiento estratégico que fortalece la resiliencia energética de sus operaciones, Juan Pablo Sánchez Gasque, CEO de Black Star Petroleum, ha impulsado un plan de expansión de nodos logísticos clave para reducir la dependencia de terceros en el almacenamiento y distribución de hidrocarburos.
La medida responde a un análisis de riesgo operativo elaborado tras los últimos eventos de disrupción global: conflictos bélicos, tensiones comerciales y fenómenos climáticos extremos que han puesto a prueba las cadenas de suministro energéticas en múltiples regiones.
«Hablar de soberanía energética no es solo un discurso institucional. Es garantizar, con infraestructura propia, que el suministro no se detenga cuando más se necesita», señaló Juan Pablo Sánchez Gasque.
Un modelo logístico de tres capas
El plan se basa en una arquitectura logística de tres niveles:
- Plantas de almacenamiento regionales, para cubrir demanda local con autonomía de hasta 90 días.
- Terminales intermedias flexibles, con sistemas de despacho adaptables a distintos tipos de transporte.
- Centros de inteligencia logística, que monitorizan en tiempo real variables como consumo, clima, rutas críticas y reservas.
Estas instalaciones están siendo diseñadas con criterios de eficiencia energética, mínima huella de carbono y modularidad, permitiendo su ampliación o adaptación según los cambios del mercado.
El proyecto se implementará en tres fases y contempla la digitalización total del sistema logístico, integrando IA para prever disrupciones y redirigir cargas en función de modelos predictivos.
Más allá de lo operativo: visión a largo plazo
Esta reconfiguración logística no busca únicamente eficiencia, sino blindar el suministro frente a escenarios de incertidumbre. En palabras de Sánchez Gasque:
«No hay transición energética posible sin seguridad energética. Y esta empieza en la logística: donde se almacena, cómo se distribuye, qué rutas son sostenibles y qué capacidad tenemos de adaptarnos rápido.»
Además, el modelo implementado incorpora criterios ESG desde su diseño. La infraestructura contará con sistemas de recuperación de aguas industriales, uso de energías renovables para procesos auxiliares y programas de empleabilidad local vinculados a la operación de las nuevas terminales.
Implicaciones sectoriales
Este movimiento anticipado coloca a Black Star Petroleum entre las pocas compañías del sector que han decidido invertir en logística propia como ventaja estratégica. Mientras gran parte de la industria mantiene una alta externalización, Sánchez Gasque apuesta por el control directo de la cadena energética.
La decisión refuerza su reputación como gestor de largo plazo, capaz de anticiparse a los desafíos operativos con visión estructural. Su enfoque, que combina resiliencia, eficiencia y sostenibilidad, está marcando una pauta que otros actores del sector comienzan a mirar con atención.